Debemos recordar, distintos géneros de asientos que hemos utilizado desde el instante en que tenemos uso de razón. En los años de la infancia, podemos rememorar los asientos que tenían los muebles de madera confeccionados en su mayor parte en casa. Un armazón grande, con respaldos y laterales de madera con los tradicionales cojines de tela, completaba lo que en estos tiempos se podría llamar un sofá. El asiento de la escuela, del colegio, los bancos de los parques, el asiento que de distancia a distancia era utilizado por los concurrentes.
A día de hoy, dichos asientos no existen por el hecho de que han cedido su sitio a unos metálicos y a una serie de artículos más ornamentales y cosas nuevas que se pueden ver. Rememorando sofás utilizados en la infancia, adolescencia y juventud, lo que habría que remarcar es que en la mayor parte de lugares los asientos eran sillas de madera o bien bancos con respaldo o bien sin él. Los sofás de los consultorios, de las salas, etc forman una parte de las fotografías que se pueden apreciar en las galerías, tal como en las recopilaciones de la familia, y en los diarios, gacetas y otras publicaciones, tal como los afiches y fascículos de publicidad de las diferentes casas comerciales.
Me da la sensación de que dibujos, pinturas, fotografías, carpinterías, salas de exhibición de las casas comerciales, pueden verse mucho mejor los asientos, sillas, bancos y sofás. Nada que ver con los sofas modernos de los tiempos presentes.
El planeta de Internet y las tiendas online de sofás de piel.
En el fantástico escaparate que es Internet, veo día tras día que aparecen nuevas tiendas de sofás de piel online, prácticamente todas con fantásticas ofertas, prácticamente espectaculares, prácticamente todas con productos semejantes, ciertas de ellas con productos o bien sofás de piel, chaise longue prácticamente iguales o bien fabricados para anunciarlos a ofertas muy, muy, singulares., no obstante ninguna de ellas ofrece la información del “ropaje” como llamamos los profesionales al tapizado, las pieles prosiguen siendo de la calidad prácticamente frecuente en España, piel flor rectificada, o bien como afirman prácticamente todos los fabricantes de pieles “Naturales”. Te explicamos a continuación, ciertas cosas, aunque puedes entrar en la tienda online de las páginas web.
Se trata de una tradicional polémica en la industria del mueble tapizado. Hay una tendencia de determinados fabricantes a fortalecer las pieles plastificadas, absolutamente cubiertas de poliuretanos. El único razonamiento que justifica el empleo de imitación de piel es el bajo costo de ésta, sin embargo un sofá tapizado en piel plastificada producirá inconvenientes de agrietamiento. No obstante el usuario del mueble tapizado, lo que busca es la calidez de la piel natural, el tacto agradable de la piel natural plena flor.
Pieles naturales:
Pura anilina: Es, sin duda, entre los materiales de recubrimiento más suaves que existen, más para conseguir esta suavidad se le aplica muy poca protección y por tanto es bastante frágil. Cuando se tiñen las pieles, el color penetra completamente, mas pese a esto se aprecian las diferencias de tono en diversos puntos de la misma, en tanto que absorbe el tono de una forma diferente. La superficie natural continúa inalterada, con lo que se reconoce la estructura de manera fácil. Esta tipología se acostumbra a hacer con la mejor calidad de la piel curada, y se distingue por el buen tacto que tiene.
Pigmentada o bien protegida: La pigmentación consiste en la aplicación de partículas de color en la superficie de la piel. La flor se cubre con un estrato y, para progresar su aspecto final, se le imprime un grabado. Merced al estrato la piel consigue mayor resistencia a la luz, a la abrasión y al empleo cotidiano. Aparte de facilitar enormemente la limpieza, asegura una mayor uniformidad del color y esconde los defectos.
Nobuk o bien piel vuelta: Lo esencial de esta piel es la apariencia afelpada. Tiene un mantenimiento complicado, pues absorbe de manera rápida las máculas e inclusive la suciedad y el polvo al emplearse a diario.