La utilización de los lentes de contacto (también conocidos como lentillas o pupilentes) llegó a ser muy popular a lo largo de los últimos veinte años. Se calcula que, en la actualidad más de 130 millones de personas en todo el planeta los utilizan normalmente.

Las lentillas de contacto poseen algunas ventajas en relación a las gafas, como la comodidad para la práctica de deportes, un alto campo de visión y que son casi totalmente imperceptibles, lo que estéticamente acaba siendo muy importante.

Las lentillas de contacto disponen básicamente de tres indicaciones:

Corrección visual de grado, bien sea por miopía, por hipermetropía, astigmatismo o presbicia.
Cosmética, como es el caso de las lentillas de contacto de color.
Terapéutico, para corrección de varias enfermedades oculares como queratocono o posterior a las cirugías.

La utilización cosmética de las lentillas se ha convertido muy popular. Hay personas que utilizan lentillas de colores, para cambiar el color de los ojos. Otros utilizan lentillas estilizadas, para modificar la forma de los ojos, lo cual es bastante normal en películas y fiestas. En los EE.UU. cuando celebran Halloween, es costumbre que las personas utilicen este tipo de lentillas como una parte más de sus disfraces.

Las lentillas de contacto están divididas en gelatinosas y rígidas.

Lentes de contacto y colirios

Se dispone básicamente de dos tipos de colirios, los que poseen medicamentos y los que apenas albergan sustancias lubricantes. Cualquier colirio que contenga medicamento “no debe” ser utilizado en las lentillas de contacto, pues las pueden dañarlas. Si el uso de colirio con medicamento es preciso, deben quitarse las lentillas, aplicar el colirio y solamente tras unos veinticinco minutos, se pueden colocar las lentillas de contacto otra vez.

Los colirios pueden ser utilizados con las lentillas de contacto, si son apenas lubricantes.

Fuente: lentillasadomicilio.comlentillas