Para ir al psicólogo, es suficiente con que se produzca una sola de las situaciones que explicamos. La gente no sabe cómo dejar de sufrir, cuando en casi la mayoría de las veces, padecemos inútilmente. Síntomas que nos indican de la necesidad de visitar a los psicologos:
* Notas que no tienes el control sobre el día a día (cosas diarias).
* Comienzas a somatizar (distintos dolores, dependiendo de las características de cada persona) o a padecer ataques de ansiedad (presión en el pecho, ritmo cardiaco acelerado, hiperventilación o respiración acelerada, sudoración…).
* Nulo control emocional (Llanto, rabia, angustia, tristeza, desolación, sentimientos de impotencia, desesperanza…).
* Te encuentras en una situación límite, que no conoces como solucionar o no tienes ganas para afrontar (Problemas graves de pareja, hijos o trabajo).
* Tu área emocional te arrastra y eres incapaz de analizar las cosas con objetividad y actuar con inteligencia.
* Siempre con pensamientos negativos, obsesiones o fijaciones… que no le dejan vivir la vida con normalidad.
* Deseas que la vida se termine y sientes que no tiene sentido tu existencia en este mundo.
* Posees una agresividad que no eres capaz de controlar, y tu mismo sabes que puede desencadenar en situaciones límite.
* Piensas que todos están contra tí.
* Situación difícil para descansar, conciliar el sueño, saber desconectar, y no puedes vivir la vida con normalidad.
No es necesario encontrarse en una situación excepcional o extrema. Cuando sientas que precisas ayuda en tu vida de cada día, porque no conoces cómo afrontar la situación que estás viviendo, es aconsejable consultar al especialista.