Ya sea que desees usar uno por placer o por razones médicas, aquí cubrimos todo lo que necesitas saber sobre los dilatadores anales.
¿Qué es exactamente un dilatador anal?
Un dilatador anal es un dispositivo que se usa para estirar el ano.
Aunque los estilos pueden diferir un poco dependiendo de si se usan con fines médicos o por placer, la mayoría son suaves y tubulares.
Por lo general, están disponibles en juegos de diferentes tamaños para que pueda ir ascendiendo gradualmente.
Creemos que el placer es un aspecto fundamental de una vida sexual segura y saludable. Es por eso que confiamos en escritores experimentados, educadores y otros expertos para compartir sus sugerencias sobre todo, desde la técnica que usa hasta el artículo sexual que compra.
Sólo, recomendamos algo que realmente amamos, por lo que si ves un enlace de tienda a un producto o marca específica, sepas que se ha investigado a fondo, si sabes a qué nos referimos.
¿Para qué se usa un dilatador anal?
Como se mencionó, los dilatadores se pueden usar por razones médicas o por placer erótico.
Desde el punto de vista médico, los dilatadores se utilizan para ayudar a estirar el recto a un tamaño ideal para mejorar la función y la comodidad después de los procedimientos anorrectales. Esto puede ser desde cirugía de hemorroides, hasta tratamiento de cáncer de próstata.
Los dilatadores, también se utilizan para preparar el ano para el sexo del trasero.
Estirar gradualmente el ano, puede hacer que todo tipo de penetración anal sea más placentera, sin el factor ouch de intentar saltar directamente. Y por todos los tipos, estamos hablando de sexo P-en-A, sexo con correas, tapones anales, boquiabiertos o Puño.
¿Es seguro?
Los dilatadores, son generalmente seguros cuando se usan según las instrucciones y con las precauciones necesarias.
Los resultados no son rápidos ni permanentes, y lograr el estiramiento que deseas requerirá tiempo y algo de prueba y error.
La paciencia, sin mencionar la buena preparación, es tu mejor amiga cuando usas dilatadores.
¿Duele? ¿Cómo se siente?
Podría doler si no tienes cuidado. Pero si te tomas tu tiempo, no deberías sentir más que una pequeña molestia, mientras tu ano se acostumbra a la sensación de ser penetrado.
Debe mencionarse, que insertar cualquier cosa en tu trasero puede provocar la sensación de necesidad de defecar.
No te preocupes, no vas a hacer caca. Esta es sólo una respuesta normal provocada por la estimulación de los mismos nervios y músculos que juegan un papel en el proceso de defecación.
Existen dos necesidades de dilatador anal, los médicos y los de placer que los hay de gran variedad de formas y colores en los que existen además diferentes tamaños.
¿Existen diferentes tipos de dilatadores para elegir?
Y cuál eliges, se reduce a qué estás usando un dilatador y a tus preferencias personales.
Los verdaderos dilatadores anales, que originalmente fueron diseñados para uso médico, son lisos y rectos. No es que no puedas usarlos para prepararte para el sexo trasero, pero los que están hechos para el placer son un poco diferentes.
Para empezar, generalmente se les conoce como entrenadores anales. También están disponibles en diferentes formas. Algunos tienen una punta más ancha y otros son tapones anales, que tienen un extremo cónico y una base acampanada.
Luego está el costo: los kits de dilatadores médicos pueden ser bastante caros en comparación con los que se usan como artículos sexuales.
Dilatador anal ¿cual necesitamos?
No estamos diciendo que debas arriesgarte a la bancarrota ni nada, pero elegir un dilatador de calidad es importante.
Bien que tu dilatador sea para fines médicos o para divertirte en el trasero, estará dentro de tu cuerpo.
Estas, son algunas cosas que debes tener en cuenta al comprar dilatadores.
Talla
Si un proveedor de atención médica te recomendó el uso de dilatadores, es probable que también te haya proporcionado alguna orientación en cuanto al tamaño.
De lo contrario, la regla general es comenzar con el más pequeño que puedas encontrar y subir gradualmente.
Resiste la tentación de empezar con el más grande, porque es probable que se rompa uno nuevo.
La mayoría de los kits de dilatadores, comienzan con alrededor de 127 milímetros de diámetro, que es un buen punto de partida para la mayoría.
La longitud no es un factor si tu objetivo es la dilatación. Sin embargo, querrás asegurarte de que todo lo que uses tenga una base acampanada. Nunca debes insertar nada en tu ano que no tenga una base acampanada, ya que podría atascarse y provocar una emergencia médica.
Material
No todos los materiales son seguros para tu lugar especial, por lo que definitivamente querrás tener en cuenta, de qué está hecho tu dispositivo.
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dilatadores hechos de materiales seguros para el cuerpo, como silicona de grado médico, que no contengan ftalatos ni BPA.
Sus opciones generalmente incluyen:
-silicona
-policarbonato
-acero inoxidable
Si eres completamente nuevo en la penetración anal o tienes una condición médica que te causa dolor rectal, la silicona es más suave y más flexible que otros materiales.
También se adapta al calor de tu cuerpo más rápido que otros materiales, lo que lo convierte en una experiencia más cómoda.
A continuación, te mostramos algunas opciones en diferentes materiales:
Peso
El peso, no es un factor tan importante cuando se trata de dilatadores tradicionales como lo es con los tapones.
Los tapones anales, están diseñados para permanecer en su lugar y el peso adicional ayuda.
Esto significa, que no tienes que preocuparte de que salga disparado de tu trasero en caso de que te muevas hacia abajo, lo cual es un instinto natural cuando hay algo en tu trasero.